Después de tanto
tiempo..
hoy vengo a
recordar..
los momentos
vividos
en el manantial.
Mi rostro reflejado
en el cristal de
tus aguas
recuerda cuando
joven
nos bañabamos en él
volaban mis
enaguas
todos reíamos
al chasquido del
agua
y las piedras nos
amamos,
Querido río
De agua clara y
fresca,
De melodía incomparable
vuelo a otros
mundos
en constante
embeleso.
Amante
fuerte y gallardo
Río
cada día, cada
minuto
cada vez mas mio.
Eres rebelde
y en tu furia loca
arrasas con todo,
limpiando
tormentos retando
al mismo universo.
aquí estoy
para fundirme en
lo profundo
de tus aguas
para saciar esta
sed que tengo de ti.
Y.. hoy ..luego de
tantos años
es muy tarde , la
vida y sus caminos
Amado Río
yo te miro sin
días,
sin edad, sin
huellas...
Yo busco mi rostro
envejecido
en tus aguas
tu amado río
me miras con los
ojos del alma
como lo hago yo
nos miramos el
alma
con deseos de amar
con la fuerza y la
rebeldía
de un joven
con la pasión que
despierta
la culminación de
lo perfecto
para nunca olvidar
lo que siempre
seremos.
1 comentario:
El amor no tiene edad, cuando es verdadero. El río no cambia más la figura de la mujer si cambió, pero seguro estoy que ese río la amó tanto cmo siempre lo hizo. Me parece un poema muy lindo. Está lleno de amor y nos invita a pensar que realmente la edad para algunos puede no tener ninguna influencia en sus sentimientos.
Gracias por compartir este poema hermoso.
Saludos.
Raúl Valdéz
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